Con el blanqueo exprés de hasta u$s 50.000 por mes por persona, el ministro Toto Caputo terminó de delinear el Plan Platita Dulce electoral. El Gobierno busca movilizar la economía tapándole los ojos y atándole las manos al fisco. De yapa, si la medida tiene éxito, bajarán el dólar y la inflación. Todo parece marchar acorde al plan electoral.
Es la medida más libertaria del gobierno de Javier Milei: la ARCA tendrá menos herramientas para fiscalizar y, Congreso mediante, más restricciones para investigar y menos plazo para hacerlo antes de que prescriba el delito.
Caputo habló del impacto económico buscado. «Nos da lo mismo que la remonetización se produzca en pesos o en dólares», dijo en conferencia de prensa.
«Hasta es casi más natural que se produzca en dólares, porque pesos hay el equivalente a unos u$s 37.000 millones y, en dólares, hay entre cinco y diez veces esa cantidad», afirmó.
Que el crocante baje el dólar
Si los dólares crocantes entra al sistema y los impuestos y salarios se pagan en pesos, las concesionarias de autos que reciban verdes deberán venderlos -en todo o en parte- para cumplir con sus obligaciones. Esto aumentará la oferta de divisas en el mercado oficial sin cepo, lo que debería contribuir a que el dólar vaya hacia el piso de la banda de flotación.
Bajar el dólar y desacelerar rápido la suba de precios -con el objetivo de que la inflación mensual empiece con 1 en junio- es el combo de la batalla electoral. Hay, también, una apelación fuerte en el provocador «tus dólares, tu decisión» que enfatizó Manuel Adorni.
La consultora Epyca sostuvo que el último anuncio «tiene un fuerte componente electoral, aspiracional y hasta emocional-simbólico». En resumidas cuentas, ratifica la menor intromisión del Estado en la vida de la ciudadanía, pueda o no comprar dólares y guardarlos abajo del colchón.
Este mix de economía y simbolismo electoral se lee en la reducción de aranceles e impuestos a la electrónica, que también debería tener impacto en los precios. Nadie duda de que bajar los precios de la tecnología elemental, como teléfonos celulares, es necesario.
La norma incluyó la reducción de impuestos a la play station, pero dejó afuera a las notebooks, que son mayormente importadas, siguen con una tarifa del 16% y son, para el Estado, una fuente de recaudación.
Objetivo: inflación
El Gobierno hace todo lo que está a su alcance para planchar el dólar y la inflación.
- «Domó» el traslado a precios de la devaluación con escraches a las empresas que se apuraron a aumentar. Celebró que Aluar bajara el aluminio 25%, lo que debería tener impacto en distintas cadenas productivas.
- Anunció la baja de aranceles e impuestos y la apertura de importaciones, a un dólar cada vez más barato.
- Explicitó que no homologará las paritarias que supongan aumentos de más de «uno coma poco por ciento» mensual, aunque el IPC esté en la zona del 2,8%.
- Dosificó los aumentos de tarifas de los servicios de energía eléctrica y gas. Recién subió el boleto del colectivo interjurisdiccional lo justo y necesario para pagar la paritaria.
- Favorece la no renovación del 100% de los vencimientos de deuda del Tesoro, para convalidar la baja de tasas en pesos -aunque convenientes en dólares- que dinamice el crédito del sector privado.
- Interviene en el mercado de dólar futuro, para setear expectativas de devaluación hasta fin de año e impulsar el carry trade.
Economistas de distinto pelaje marcan las inconsistencias, como la no acumulación de reservas. Tanto el Fondo Monetario Internacional (FMI) como la ARCA miran para otro lado. Pero estos mismos analistas coinciden en que el esquema tirará cómodamente hasta las elecciones calientes de septiembre (provincia de Buenos Aires) y octubre (las legislativas nacionales).
Calendario electoral
La sucesión de buenos resultados electorales para el Gobierno -y, sobre todo, malos para el kirchernerismo- alineó también a los mercados.
«El electorado porteño reivindica la estrategia oficialista de privilegiar -casi de manera excluyente- la desaceleración inflacionaria como activo político principal de origen económico, dado que la voluntad popular apoya el plan a pesar de los costos colaterales inevitables de un programa de ajuste y una actividad heterogénea que en los sectores dinámicos apenas roza los niveles previos al ajuste (con un ingreso disponible para consumo que es 10% inferior al de noviembre de 2023)», indicó Empiria, la consultora de Hernán Lacunza.
«Para los mercados, una señal contundente de apoyo popular (matices aparte, más del 60% del electorado eligió opciones que respaldan total o parcialmente el rumbo económico) es suficiente para financiar -al menos transitoriamente- eventuales inconsistencias cambiarias», añadió.
Y el campo acompaña. Aunque los costos no cierren, la amenaza latente de que a partir de julio subirán las retenciones a la soja, el maíz y el girasol y la sensación de que el dólar no irá a buscar el techo de la banda en el corto plazo hizo que la liquidación de la cosecha gruesa acelerarse.
Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las ventas del primer cuatrimestre totalizaron u$s 10.600 millones y fueron u$s 2.000 millones superiores a las de hace un año.
Producir ya fue
Con el Plan Platita Dulce a todo vapor -ahora, atizado por los dólares del colchón- sigue sin verse un repunte en la inversión productiva.
Un consultor con trato directo con multinacionales y grandes firmas nacionales resumió: «Las empresas ya ajustaron sus stocks en los últimos años».
El índice de Capacidad Instalada del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) así lo demuestra. La economía se contrajo 1,8% mensual en marzo, según el organismo a cargo de Marco Lavagna, y habría caído otro 0,8% en abril, según Equilibra.
Caputo, sin embargo, elige creer. «Le comenté al Presidente que desde hace unos meses veo a los empresarios mucho más en sintonía con este modelo. Hoy te hablan de que en este nuevo esquema van a tener que invertir porque la única forma de sobrevivir es invirtiendo y siendo más eficientes», dijo en Carajo.
Como contó Letra P hace unas semanas, el empresariado copa las ferias de comercio exterior de China. Para ellos, invertir es reemplazar líneas de producción locales por importaciones.
LetraP