En Sarasanegro, un exclusivo restaurante de Mar del Plata, a puertas cerradas y en la previa de un almuerzo organizado por el ex Dow Gastón Remy, Mauricio Macri deslizó críticas al gobierno de Javier Milei mientras ejecutaba el take over con silenciador.

«Quédense tranquilos, el león está domado y rendido», fue una de las frases que se le atribuyó a Macri, desmentida a medias por un importante dirigente del PRO, que admitió a LPO que el ex presidente sigue cuestionando el manejo de la «micro» del gobierno.

Macri deslizó que el de Milei es un gobierno de transición y que en las próximas elecciones la sociedad va «a consolidar el cambio», pero con un rechazo creciente al histrionismo y la locura de Milei, que ya está agotando a una parte importante del electorado.

LPO